Aunque hace muuucho
Superamos el metro veinte
Dejamos de creer en los reyes magos
Aprendimos a leer de corrido
Guardamos o regalamos los juguetes (y el elástico snifff)
Supimos que el viejo de la bolsa no existe (o si?)
Perdimos algunas ilusiones
Descubrimos nuevas sensaciones y adquirimos algunas habilidades
Nos sorprendieron dolores que ni siquiera imaginábamos
Nos resignamos a aceptar responsabilidades
Intentamos racionalizar los miedos
Dejamos de sentirnos inmortales
El niño que fuimos con toda la inocencia, las ganas, la alegría, el deslumbramiento, los sueños, la confianza, la urgencia, la expectativa, los temores, los berrinches, las inseguridades … ese niño sigue allí, esperándonos. No lo olvidemos.
Superamos el metro veinte
Dejamos de creer en los reyes magos
Aprendimos a leer de corrido
Guardamos o regalamos los juguetes (y el elástico snifff)
Supimos que el viejo de la bolsa no existe (o si?)
Perdimos algunas ilusiones
Descubrimos nuevas sensaciones y adquirimos algunas habilidades
Nos sorprendieron dolores que ni siquiera imaginábamos
Nos resignamos a aceptar responsabilidades
Intentamos racionalizar los miedos
Dejamos de sentirnos inmortales
El niño que fuimos con toda la inocencia, las ganas, la alegría, el deslumbramiento, los sueños, la confianza, la urgencia, la expectativa, los temores, los berrinches, las inseguridades … ese niño sigue allí, esperándonos. No lo olvidemos.