lunes, 18 de octubre de 2010

Perro que canta no muerde


Pablo: Ah! tenemos un perro che.

Any: Ahhhhh que bueno! Me imagino como estarán todos con un cachorrito en la casa!

Pablo: Bue si … pero no es precisamente un cachorrito …

Any: ¿?

Nelly, vecina de Pablo, murió hace un par de semanas. Unos 80 años, viuda, sin familia cercana mas que unos sobrinos. Se conocieron con Cacho en la calle un día de invierno. Lo habían abandonado cerca de la casa de Nelly; era muy chiquito y un quejido insistente indicaba que tenía frío y hambre. Estaba dentro de una caja tapado con una hoja de diario que anunciaba una próxima actuación de Cacho Castaña; Cacho, asi lo bautizó Nelly y decidió quedárselo.
El perro fue su compañía de los últimos años, iban juntos a todas partes; después de mucho tiempo Nelly volvía a tener a alguien que la esperaba. Cacho la esperaba en la puerta del supermercado, en la escalinata de la iglesia y en la terraza como un vigía cuando debía quedarse.
Después de la muerte de Nelly aparecieron los sobrinos para ocupar la casa. Limpiaron y tiraron todo lo inservible y entre todo eso estaba Cacho, que fue desalojado sin ningún tipo de miramientos.
Como un piquetero versión canina Cacho se instaló delante de la puerta de calle en señal de protesta o quizás con la esperanza de que lo dejaran retornar a su hogar. Ni hablar, los nuevos ocupantes no querían saber nada con un perro viejo y medio enfermo (camina con dificultad por algún problema en las patas traseras). El último intento de Cacho de entrar en la casa fue rechazado a escobazos literalmente por el nuevo dueño.
Y allí entró en escena Pablo, viejo defensor de pobres y ausentes, que indignado ante la escena se puso a discutir con el vecino maltratador. Y que si, y que no, y que ud no puede tratar asi a un animal, y que a ud que le importa, y que ud es un maleducado, y que ud que se mete, y que lo voy a denunciar, y que váyase a la mierda! y … slam! se cerró la puerta de la casa en las narices de Pablo.
Mientras tanto unos metros mas allá Cacho se hacía amigo de Rosario que le hablaba queriendo saber si le dolían los golpes.

“Dize Cacho si no lo dejamoz dormir en caza”
“Y vos como sabés que dice Cacho?”
“Porque haze guiiiii guiiiii y pone cara trizte, lo podemoz llevar?”

Any: Y que pasó?

Pablo: Y bueno, ahora Cacho está instalado en casa, come como un león huérfano, lo llevamos al veterinario y le dio un antiartrósico que me sale mas caro que un crucero a la Polinesia, llora de noche y pega unos aullidos que nos hacen saltar un metro de la cama y clavar las uñas en el techo, pierde pelo porque está estresado (según el veterinario) y hay que pasar el escobillón 30 veces por día, lo llamás y no te da bola porque está medio sordo … es toda una adquisición

Any: Se lo van a quedar?

Pablo: O me lo quedo o tengo que echar al perro y a mi hija porque me va a volver mas loco de lo que estoy … no tengo muchas opciones.

Any: Y canta “Garganta con arena”?

Pablo: Andate a la p********* ….!!!