martes, 20 de octubre de 2009

Origami catártico (¿?)




Estoy cansada de laburar al cuete.
Esto pensaba esta tarde sentada en mi escritorio mientras hacía origami con unas cédulas que tuve que hacer “urgente” a las 16 hs y que dejaron ese estado a las 17 hs después de varios contubernios y un par de llamados telefónicos. “Dejá, no hagas las cédulas del tema Marini, ya lo arreglé … me hiciste el listado que te pedí?”
Y no, no hice el listado … si hago una cosa no puedo hacer la otra, no soy maga, no tengo poderes, no tengo una doble (aunque vos viejo necesitarías un doble de riesgo para no romperte todos los huesos cuando yo te empuje por la ventana …)
Esta tarde miraba la montaña de papeles, carpetas, expedientes, y me preguntaba donde estarán esos 'papelitosdemierda' dentro de 2, 5, 10 años? En la basura claro.
Millones de hectáreas de bosques taladas, miles de hacheros explotados, cientos de obreros trabajando por dos monedas en las fábricas de papel, decenas de intermediarios hasta que el papel llega hasta mi. Y mi propio esfuerzo desperdiciado, encerrada alli dentro mientras la primavera sacude todos los rincones de la ciudad, los parques explotan de verde y me esperan a que vaya mate en mano para tirarme panza arriba en el pasto y para llenarme los pulmones de aire y los ojos de rio!
Y yo donde estoy? Escribiendo cosas que son “urgentes” durante media hora a lo sumo, apilando hojas y hojas de sandeces sobre mi escritorio, gastando mi tiempo, mi atención y lo poco que queda de mi cerebro en cosas que tienen menos vida útil que un cotonete para limpiarse la oreja.
En eso estaba meditando cuando desde leeejos me llegó el eco de esa voz infame preguntándome “Y? Terminaste el listado?”.
Me cuestioné seriamente si le partía la silla en
la cabeza … pero no, abrí una nueva resma y me puse manos a la obra.